09 agosto 2015

Otra cagada

Creo que uno de los síntomas de amar a alguien es que en momentos de dolor no se piensa con claridad.

Ella me pidió que no la agobiara. Lógico después de todo.
Pues no se me ocurre otra cosa mas que comprar una docena de rosas amarillas, que se que le gustan, colarme en su casa y dejarlas en su cama.
Un gesto romántico que, seguramente, en otra situación, hubiera sentado muy bien. Estoy seguro que es una gran cagada. Que lo único que va a servir es para alejarla mas.

Yo solo quería que fuera mi princesa para siempre, verla venir hacia mi vestida de princesa, hermosa radiante y feliz. Iba a pedirla que se casara conmigo, mas adelante, pero no me dio la oportunidad.

No hay comentarios: